miércoles, 30 de diciembre de 2009
leyendas de mc donalds
domingo, 27 de diciembre de 2009
El sacamantecas
Tiempo después, la criatura de sus fantasías volvía a entrar por una ventana. Otra mujer estrangulada y destripada cerca del dolmen. La policía buscaba a alguien que creían muy inteligente, feroz y que no dejaba huellas.La tercera víctima fue una niña de 13 años. Las mujeres de toda la región alavesa se encerraban en sus casas. No se atrevían a salir. Empezaban a hablar de un monstruo que sacaba las mantecas de sus víctimas. Algunas mujeres escaparon de sus garras, pero el terror era tan grande que nunca pudieron identificarlo. Veían a alguien deforme y con el rostro irreconocible.A la quinta víctima le quitó la aguja de coser que llevaba como pasador de pelo y se la clavó cincuenta veces en el pecho.
El periódico "El pensamiento alavés" abría su portada así: "Se busca a un sacamantecas".Cuando el demonio dejaba en paz a Juan, éste seguía con su pobre vida. Enviudó tres veces, podéis imaginar el destino de aquellas pobres mujeres.En el invierno de 1879, mientras Juan Díaz de Garayo trabajaba en el campo, una niña de cuatro años que pasaba por allí con su padre lo vio. La niña lloraba muerta de miedo mientras señalaba a Juan y decía a su padre: "Papá, ese hombre es malo. Ese tiene que ser el sacamantecas". La prensa contaba después, que Juan se derrumbó, le habían descubierto después de tantos crímenes.Juan Díaz de Garayo fue apresado y encerrado en la prisión de Vitoria. La Guardia Civil contaba que Juan había confesado no saber lo que había hecho, casi no podía articular palabra. En el informe forense se destacaba: "Su cráneo, su frente parece la de un neandertal. Mandíbulas prominentes. Es un macho brutal, un monstruo. Su rostro está lleno de asimetrías. Un enigma de la moderna antropología. Y en los crímenes algo extraño le ha obligado actuar. Él dice que ha sido el demonio". (Informe forense de Bernardo de Quirós).Un mes después, el más famoso verdugo de la época, Gregorio Mayoral, llegado de Burgos; lo sentaba en el garrote vil. Y el verdugo no pudo evitar el miedo.
Aquel hombre era diferente. Algunos juran, que aquella noche en la prisión, se oyó un extraño grito.El sacamantecas fue enterrado en una tumba sin nombre ni cruz. Varios vecinos de Eguilaz, vieron a un extraño espantapájaros cerca del dolmen y otros dicen haber visto a un extraño ser esconderse en las viejas ruinas. Aquello ya era el inicio de la leyenda de "los crímenes del monstruo sacamantecas".
El hombre del saco
La leyenda del Hombre del saco tiene su base real en un crimen cometido en Gádor, un pueblo de Almería, en 1910.
Francisco Ortega el Moruno, estaba gravemente enfermo de tuberculosis y buscaba desesperadamente una cura. Acudió a una curandera, Agustina Rodríguez, quien al ver el caso lo mandó a Francisco Leona, barbero y curandero que tenía antecedentes criminales.
Leona le pidió tres mil reales a cambio de la cura y le reveló el remedio: tenía que beber la sangre de un niño sano, recién salida del cuerpo, y ponerse en el pecho emplastos de las mantecas aún calientes de la criatura. Le prometió que de esa forma sanaría enseguida.
Leona se ofreció él mismo buscar al niño, y tras ofrecerle dinero a varios campesinos a cambio de sus hijos de manera infructuosa, salió junto con el hijo de Agustina, Julio Hernández el tonto, en busca de algún niño extraviado.
En la tarde del 28 de junio de 1910 secuestraron a Bernardo González Parra, de siete años, que se había despistado mientras jugaba con sus amigos y se había separado de ellos. Leona y Julio lo durmieron con cloroformo, lo metieron en un saco y lo llevaron al cortijo de Ardoz, aislado del pueblo, que Agustina había puesto a disposición del enfermo. Otro hijo de Agustina, José, fue a avisar a Ortega, mientras en la casa se quedaba su mujer, Elena, preparando tranquilamente la cena.
Una vez que todo el mundo estuvo en la casa, sacaron a Bernardo del saco, despierto pero aturdido, y le realizaron un corte en la axila para sacarle sangre, que recogieron en un vaso. Mezclada con azúcar, Ortega se bebió la sangre antes de que se enfriara. Mientras, Julio mató al pequeño golpeándole la cabeza con una gran piedra. Leona abrió el vientre del niño y le extrajo la grasa y el epiplón, y lo envolvió todo en un pañuelo que puso sobre el pecho de Ortega. Una vez terminado el ritual, ocultaron el cuerpo en un lugar conocido como Las Pocicas, en una grieta en la tierra, y lo taparon con hierbas y piedras.
Al realizar el reparto de dinero, Leona intenta engañar a Julio y no le paga las cincuenta pesetas que le prometieron por el asesinato. Éste decide vengarse y le cuenta a la Guardia Civil que ha encontrado el cuerpo de un niño por casualidad mientras cazaba liebres. Detuvieron a Leona por tener antecedentes, y éste culpó a Julio, que en un principio declaró haber presenciado el crimen desde unos matorrales. Al final los dos hombres confesaron el crimen.
La Guardia Civil detuvo a todas las personas implicadas en el asesinato de Bernardo. Leona fue condenado al garrote vil, pero murió en la cárcel. Ortega y Agustina fueron también condenados a la pena máxima y ejecutados. José fue condenado a 17 años de cárcel y su mujer, Elena, fue absuelta. Julio el tonto, condenado
Los chupacabras
Con este término se designa a una posible bestia que ataca a animales domésticos en Iberoamérica. Los ataques del Chupacabras, de los que se tiene constancia por los lugareños, se han producido principalmente en Puerto Rico, aunque Méjico y diferentes zonas de Sudamérica tampoco se libran de los inquietantes y supuestos ataques del chupacabras.
La primera constancia actual que se tiene del chupacabras fue en Bolivia en los años sesenta, aunque la mitología popular señala apariciones de depredadores similares desde el primer milenio antes de la era común. Desde entonces han sido constantes las apariciones del depredador en toda Iberoamérica, sobre todo a partir de los años noventa.Lo que es evidente que los ataques son reales y documentados, y que la leyenda de esta extraña bestia se han extendido por todo el nuevo continente. Una especie de lobo gigante que chupa la sangre de los animales de granja o incluso se ha documentado ataques a personas.El profesor Ufo fue testigo de los restos encontrados en Bolivia durante una viaje de investigación. Una leyenda con base científica que les relatamos en este especial de ocultismo y conspiración.
Muchos de los animales atacados habían sido mutilados, con extracción de órganos vitales y vísceras. Se han dado muchos casos de animales también salvajes.
Es muy frecuente la aparición de hembras sin sus órganos reproductivos, lo que alimenta más la especulación de rituales de corte satánico o demoníaco.
Se cree que podría ser una criatura de pequeño tamaño, debido a que sus presas suelen ser animales domésticos no muy grandes, principalmente cabras, de ahí su apelativo, gallinas y conejos.
La multitud de versiones y de presuntos testigos ha hecho del aspecto del chupacabras una especie de quimera contemporánea. Por las descripciones, se podría tratar de una especie de reptil con cuernos, colmillos y garras. Pero la sugestión lo ha hecho más temible, con una trompa succionadora de sangre, alas, y aspecto antropomorfo.Pero esta idea inicial del chupacabras no es la única.
Hay una corriente muy extendida de supuestos testigos que dicen que no es más que un perro salvaje, eso sí con extraños poderes sobrenaturales, como un perro poseido. También hay teorías que hablan de bestias peludas con ojos rojos, incluso alguna especie de canguro asesino. Lo que siempre se le da al chupacabras es una serie de poderes de salto y velocidad infrecuentes en la especie animal, lo que le convierten en el depredador más temible.
Ha varias teorías sobre qué es en realidad el chupacabras según las versiones que han dado los diferentes testigos. Aquí exponemos las principales:· Teoría que opina que el chupacabras es un ente extraterrestre. Muchos testigos dicen haber visto objetos volantes no identificados en los alrededores de los centros de actuación del supuesto chupacabras. Los que confían en esta teoría dicen que el chupacabras se podría tratar de un ser similar al “Predator” de la película pero más pequeño.
También son muchos los que ven la mano del hombre detrás de estas cacerías. Incluso que son rituales satánicos. En Méjico, historiadores del mundo precolombino han señalado la tradición que sigue teniendo desde la antigüedad el sacrificio de animales.
Y no sólo en la América precolombina, sino en rituales bíblicos se puede observar el empleo de técnicas de sangría animal que dejaban los restos animales de una forma similar a como presuntamente dejaba a sus víctimas el chupacabras.
Debido a la zona donde se prodigan sus apariciones, también se ha creído que es un castigo demoníaco por los pecados cometidos por el hombre.·
Las teorías de la evolución también han tenido su campo de actuación en el fenómeno del chupacabras. Sus defensores creen que la criatura debe ser una mutación natural de algún animal existente que ha logrado formar una nueva especie muy preparada para depredar animales.·
Quizá la más explicable de las teorías, aunque no por ello la más extendida, es la que opina que las apariciones de animales muertos coincidieron con una fuerte sequía en el Norte de Méjico, lo que pude llevar a que algún coyote, perro salvaje u otro pequeño depredador se atreviera a atacar propiedades humanas. Aunque esto no explicaría el caso más numeroso de muertes en Puerto Rico.·
Se sabe de la existencia de murciélagos gigantes que han llegado a tener dos metros de envergadura. Por eso muchos creen que el presunto chupacabras no es más que uno de estos extraños ejemplares. En Méjico se cree que se han podido avistar murciélagos de unos 9 Kg. que podrían haber migrado desde Sudamérica.·
La “conspiranoia” ha elaborado teorías más asombrosas, y es que sus amantes creen que los científicos norteamericanos están detrás de esto, creando alguna especie animal mutando varias especies animales para crear un híbrido asesino.
Se cree que Puerto Rico es uno de los campos de pruebas de este tipo que utiliza el gobierno norteamericano para hacer todo tipo de pruebas con armamento radiactivo y con sustancias de escasa seguridad ecológica.· También la conspiración “ecologista” cree que el espécimen ha podido ser fruto de los residuos tóxicos que vierte el hombre en la naturaleza, que ha creado especies mutantes.
Las teorías menos extendidas hablan ya de cosas más increíbles, por no decir imposibles, como la posibilidad de que se trate de algún saurio u otra especie de animal prehistórico que ha sobrevivido hasta nuestros días. ·
La Criatura de Elmendorf: En julio de 2004 fue abatido a tiros un extraño animal sin pelo del tamaño de una cabra, con forma de perro y con una cola larga de aspecto similar a una rata. Sus colmillos demostraban que era un depredador.
La criatura fue cazada cerca de San Antonio (Tejas) y, a día de hoy, todavía no se ha dicho qué especie animal es.Lo cierto es que el chupacabras está en el subconsciente colectivo desde el mismo momento en el que aparecen restos de ganado atacados sin explicación.
La falta de respuestas lógicas ante hechos inexplicables es lo que siempre ha motivado al hombre a generar mitos, incluso hoy en día.Aunque como hemos dicho la historia del chupacabras viene desde hace décadas, no es hasta el decenio pasado cuando el misterio se hace mucho más vivo.
Fue en torno a 1992 cuando en Puerto Rico empezaron a aparecer restos de animales domésticos brutalmente atacados sin motivo aparente. Pero el fenómeno se incrementó en 1995 donde cada día aparecía un nuevo caso en la isla.
Lo extraño del suceso era la forma en que quedaban los restos animales, y es que aparecían totalmente desangrados con una hendidura en el cuello, que se asemejaban a lo que todos creeríamos que sería el ataque de un vampiro, salvo por el hecho de que era un único orificio y no dos.
Esto es lo que más inquieto a los granjeros locales.Como estas apariciones fueron frecuentes en torno a la población de Moca, al chupacabras también se le llamó en Puerto Rico “el vampiro de Moca”. Las autoridades sospecharon más de una “broma” macabra que de un auténtico ser terrorífico. Pero, como en todos estos casos, pronto aparecieron testigos dispuestos a corroborar las hipótesis más paranormales.
Tras estos incidentes en Puerto Rico, aparecieron casos similares por toda Iberoamérica. Muchos piensan que los “bromistas” tuvieron imitadores por el mundo hispano desde EE.UU. hasta Argentina.Fui testigo directo de uno de estos ataques, no puedo afirmar que se tratara de ningura bestia mitológica pero lo cierto que las dentelladas no se parecían a nada de lo que había visto antes, pero ya se sabe que las leyendas urbanas perjudican mucho a este tipo de casos reales. Bestia, engendro, extraterestre, lo cierto es que detrás de la leyenda del “Chupacabras” se esconde una realidad siniestra de la américa profunda, llena de personajes mitológicos que les iremos acercando en nuevos reportajes.